Conservación y restauración de 365 hectáreas de Bosque Nuboso Andino. Diferentes estudios han demostrado que una de las mejores formas de combatir el clima es a través de la adaptación basada en ecosistemas, que consiste en hacer uso de los ecosistemas y la biodiversidad para ayudar a las personas a mitigar y adaptarse a los impactos del cambio climático. Además de la cobertura forestal, en “El Globo” protegemos más de 9 nacimientos de agua que conforman los principales ríos de la región, por lo que es de gran importancia para el abastecimiento de agua de las ciudades, por ende para el desarrollo nacional. Involucrar a las personas de las ciudades en este proceso, a través de compensaciones voluntarias y obligatorias de biodiversidad y carbono y turismo, es nuestra forma de hacerlo financieramente viable. Además, su vinculación les permite darse cuenta del origen de los recursos naturales (agua, alimentos, aire limpio…) que utilizan a diario y la importancia de adoptar estilos de vida más sostenibles, disminuyendo el impacto de las ciudades sobre el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.